«Proclamáis vuestra inocencia, pero no sois capaces de demostrarla [...] Ahora tendréis vuestra oportunidad ante otro tribunal tan duro, pero también igual de justo: ¡la audiencia!»
Diez personas despiertan encerradas en una habitación sin saber cómo ni por qué están ahí. Sin embargo, pronto descubrirán que todos ellos son los concursantes de un reality show del que desconocen las reglas, pero cuyo premio final es el mayor otorgado en la televisión: la libertad.
Bienvenidos a Purgatorio
Purgatorio, un nombre atrayente para los que nos gusta el terror psicológico, suspense, terror.
¿Qué me esperaba de él? Realmente nada, al menos que me entretuviera un rato.
¿Qué me he encontrado? Una novela fascinante que te mantiene en suspense hasta el último punto y coma del libro.
¿Es un poco cliché? Para mi, aunque ya hay novelas parecidas, el autor siempre sabe darle su toque que es lo que la hace especial.
Pues nos encontramos ante un parecido Gran hermano, por qué no nombrarlo si es así. Con la pequeña diferencia que en lugar de concursantes buscando dinero, nos encontramos con diez presos condenados a muerte. ¿Su premio? El que quede, obtendrá su libertad.
¿Morboso? Un poco, creo que el autor ha querido hacernos ver la cara oculta de los realities, porque aquí no hay felicidad ni todo es bonito, ni vamos a superar pruebas para obtener recompensas. Aquí sólo puede quedar uno.
Los concursantes, al parecer drogados, ya despiertan todos en una casa, pues eso, tipo gran hermano. No se sabe nada de ellos ni se conocen. Los iremos conociendo a lo largo de la novela.
Son diez concursantes, Frederick, Phoenix, Mike, Nicholas, Boone, Abraham, George, Hugo, Orson y Wyatt. Todos ellos con delitos de sangre y que no han podido probar su inocencia.
El programa dirigido por Philips Julius Spencer, a medida que suba la audiencia y se vendrá arriba, por lo que conseguir la libertad va a ser cada día más complicado.
¿Os imagináis estar controlado 24 horas para saber que vas a volver a prisión? ¿o no? Tu futuro ahora está en manos del programa y del público con el beneplácito del presidente del país.
Ha sido, a veces, realmente angustioso. Porque sin querer vas conociendo a los protagonistas y vas viendo que, aunque la muerte no tiene perdón, algunos están realmente arrepentidos de lo que hicieron porque se vieron sin control alguno.
Incluso he llegado a empatizar con alguno.
La novela se encuentra estructurada en trece capítulo y un epílogo. Narrado en tercera persona por un narrador cámara y omnisciente, porque nos hará ver y sentir todo lo que pasa en la casa y sus pensamientos.
Quizás soy una exagerada, pero creo que hay escenas bastante duras que no son para todos los públicos. Pero bueno, podéis empezar a leerlo y ver si es para vosotros o no. Yo desde luego, aquí la masoca, lo he disfrutado a tope y apenas me ha durado unas horas.
En cuanto a la pluma del autor, ha sido excelente.
Amena, fluida, y ha sabido darle ese toque morboso a las escenas que lo requerían. No se ha ensañado, pero si ha conseguido provocar ese lado gore que tengo dentro ;(
Si os apetece pasar un rato no gore, pero si un poco sangriento. Si os gustan este tipo de libros, os encantará.
No apto para gente sensible.
Ya me lo anoto, tus sugerencias siempre me gustan mucho!
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