



Paola es la farmacéutica de un pequeño y peculiar pueblo de las Alpujarras granadina. Llegó hace varios años, después de que su novio la dejase plantada en el altar, para empezar de cero. Víctor es un brillante cirujano al que su padre confina a un pequeño pueblo como castigo por no querer acatar sus órdenes. Al llegar, se dará cuenta de que no es bienvenido y que hay alguien especial que no deja de reventarle y de debatir todo lo que dice. Su primer encuentro con la farmaceútica del pueblo no será agradable y los siguientes tampoco. Entre ellos nacerá un sentimiento que ambos desconocen porque a pesar de no caerse bien, se verán obligados a pasar tiempo juntos.